Marcelino Claverino: Maldito sambenito
Con la entrepierna anudada a la garganta llegó Marcelino a la reunión de Sordotapias. La alargada sombra de la enfurecida Florinda Biensalida se cernía amenazante sobre él. Cada vez que repasaba aquel iracundo mensaje mañanero se le erizaban cada uno de los pelos de su cuerpo. ¿Qué estaba dispuesta a hacer aquella desequilibrada y despechada…