Marcelino Claverino: Una cita rápida
Bajó a las nueve en punto Marcelino al supermercado. Pese a su optimismo inicial, estaba nervioso y tenso. Infinidad de dudas le asaltaron en el trayecto de apenas cien metros que separaban su casa de la puerta del establecimiento, donde suponía, la bellísima Gimena le estaría esperando. “¿Hablará despacio? ¿Vocalizará con claridad? ¿Podré leerle los…