Este pasado fin de semana, durante la disputa de la Liga francesa de fútbol, el portero del Lyon, Anthony Lopes, sufrió una pérdida postraumática y temporal de la audición en ambos oídos por los efectos de los petardos lanzados por un grupo de hinchas del equipo rival, el Metz.
Lopes tuvo que ser hospitalizado tras sufrir mareos durante el partido celebrado en el estadio del Metz. Según su club, la pérdida de audición ha sido temporal y «no tendrá consecuencias en el futuro». Sin embargo, la nota explica que «Anthony Lopes necesitará también superar el trauma psicológico que le provocó esta detestable agresión».
El encuentro se interrumpió en el minuto 30. Un primer petardo estalló cerca del portero, que fue atendido por sus compañeros y por el equipo médico del Lyon. Otro cayó cerca de sus pies cuando estaba tendido en el campo. Tras el incidente, ambos equipos se retiraron a sus vestuarios. El árbitro suspendió el partido.
La exposición al ruido excesivo que causan los petardos puede ocasionar daños en la capacidad auditiva en el momento y a largo plazo. Y también tinnitus. Para limitar los efectos de petardos y fuegos artificiales, muy propios de las fechas navideñas que se acercan, se recomienda el uso de protectores de oídos o alejarse lo más posible de la fuente sonora.