Se llama Duck Hee-Lee. Tiene 17 años y ha nacido en Corea del Sur. Y es tenista. Ahora mismo ocupa la posición 250 del ranking ATP. Y llama la atención no solamente por su juego. Hee-Lee es sordo.
Esta joven promesa del deporte se ha convertido en el primer tenista sordo y se ha ganado el respeto de todos sus compañeros. Rafael Nadal, con el que ha entrenado en alguna ocasión, o Roger Federer han mostrado su admiración por el afán de superación de Hee-Lee.
Es un ejemplo de lucha. Ha llegado a afirmar que la sordera le impide distraerse durante el juego y motiva su concentración. Lo más difícil es la comunicación con los jueces de silla y los jueces de línea, porque no escucha sus indicaciones. A veces continúa jugando aunque se haya ordenado la repetición del saque. El deporte, una vez más, nos da una lección.